Iglesia de San Juan de la Cruz, antes de San Andrés.
Breve descripción del templo:
Declarada Monumento Histórico-Artístico Nacional en 1942, su
origen se remonta a la época de la conquista de Valencia por Jaime I el
Conquistador. En aquel entonces, era conocida como iglesia de San Andrés
Apóstol. Se erigió sobre el solar de una antigua mezquita, formando parte del
grupo de las llamadas “doce parroquias fundacionales de Valencia”.
La advocación a San Andrés parece haber sido un homenaje del
rey conquistador al padre de su segunda esposa, Violante, cuyo nombre era
Andrés de Hungría.
Según el historiador Marco Antonio Orellana (1731–1813), el
templo de San Andrés fue ampliado y renovado a comienzos del siglo XVII,
impulsado por la devoción del pueblo valenciano hacia el clérigo de la
parroquia, mosén Jerónimo Simón, fallecido el 25 de abril de 1612.
Durante el siglo XVII, el edificio fue completamente
reconstruido en estilo barroco, adquiriendo su configuración actual. La antigua
estructura gótica fue derribada al tiempo que se levantaba la nueva.
Al finalizar la Guerra Civil Española, la iglesia quedó en
estado ruinoso. Por ello, la titularidad parroquial de San Andrés fue
trasladada a otro punto de la ciudad, concretamente a la calle Colón, en un
edificio de nueva construcción. El antiguo templo pasó a manos del
Ayuntamiento, que consideró su demolición. Sin embargo, gracias a la
intervención del historiador Elías Tormo, se evitó su destrucción. En 1952, el
edificio fue vendido a la orden de los carmelitas descalzos, actuales
propietarios, quienes lo consagraron bajo la advocación de San Juan de la
Cruz.
Los servicios litúrgicos de la parroquia se celebran en la
capilla de la Comunión, situada junto a la iglesia. El arquitecto Alejandro
Ferrant Vázquez llevó a cabo dos campañas de restauración, en 1944 restauró la
portada principal y entre 1955 y 1958, realizó intervenciones en el interior
del edificio.
En 2009, la iglesia fue restaurada íntegramente al ser
seleccionada como sede expositiva por la fundación La Luz de las Imágenes,
dentro de su campaña “La gloria del barroco”.
“En seis de Febrero de mil setecientos cinquenta y
quatro los Comisarios nombrados por la Junta de Electos para el Lucimiento de
la Yglesia Parroquial del Señor San Andrés Apóstol de dicha Ciudad, su
Cascarón, Presbiterio con tres Capillas a cada lado y demás anexo y
dependencias de ella, ajustaron con Juan Francisco Rubio, Maestro de Cantería,
y con Juan Simarro y Bautista Pons, Oficiales de ella, el hacer ocho Pedestales
enteros y dos medios, por precio de ciento cinquenta libras cada uno, con
calidad de estar concluidos en el mes de Octubre del presente año, según y en
la misma forma que lo tiene Capitulado Félix Lorente, Maestro Dorador, y con
las mismas condiciones.
Que se han de executar con tres Piedras de
Villamarchante, como están executadas las Columnas de la Capilla de la
Comunión de la Yglesia de San Salvador, y con las mismas condiciones que se
expresan en el Capítulo de dicho Maestro Dorador, en quanto a el embasamento y
Cornisa, Nectos y Jambas, y los rebusidos que demuestra el modelo, colocados en
los frentes de dichos Nectos y Jambas.”
También consta en documento registrado en Valencia el 6 de
febrero de 1754, dentro del protocolo número 4.998, folios 57 vuelto al 63
vuelto, por el notario Agustín Bonet:
“1754, Febrero, 6, Valencia.
A.R.V.: protocolo n.º 4.998; fols. 57vº. -63vº.
Notario: Agustín Bonet
Capítulos y pautos pertenecientes á la obra de
cantería, eo Pedestrales, que se han de hazer y Colocar en la Yglesia
Parroquial de San Andrés Apóstol de esta Ciudad de Valencia á los que quedarán
obligados los maestros Canteros á quienes se les rematasse dicha obra, cuyos
Capítulos son los siguientes.
1.º Primeramente: Que dichos Maestros tengan
obligación de hazer ocho Pedestrales enteros y dos medios, los mismos que
existen en la nave y pies de dicha Yglesia, los que se han de executar de tres
distintas Calidades de piedra, á saber: el embasamento y Cornisa de piedra de la
Cantera ó Canteras del término del Lugar de Villamarchante, con la presisa
obligación de escoger la mejor Calidad, solidez y entereza conforme á la de las
dos Colunas del retablo de la Capilla de Comunión de la Yglesia Parroquial de
San Salvador.
Los Nectos y Jambas han de ser de la piedra de las
Canteras del Lugar de Calixh, escogiendo la más fina, entera, sólida y sin
poros ni grietas, deviendo de ser su Color ó matís según y Conforme á el de la
piedra que se señalaré por muestra.
Y de piedra mármol de Génova han de ser los rebusidos
que demuestra el modelo, colocados en los frentes de dichos Nectos y Jambas.”
Parte superior de las pilastras de las columnas.
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